Empresarios, políticos, gremios y economistas apoyaron las medidas anunciadas por Massa

Dirigentes de la Asociación de Trabajadores del Estado, la Cámara Argentina de Comercio y Servicios, la Confederación Argentina de la Mediana Empresa, Industriales Pymes Argentinos, la Asamblea de Pequeños y Medianos Empresarios (Apyme) y el Centro de Economía Política Argentina se mostraron optimistas con respecto a las medidas dispuestas por el ministro de Economía.

Dirigentes políticos, empresarios y economistas, además de funcionarios, manifestaron este lunes mayormente su apoyo al paquete de medidas dispuestas por el ministro de Economía, Sergio Massa, para afrontar el impacto de la devaluación en trabajadores y sectores de la producción, como parte del Programa de Fortalecimiento de la Actividad Económica y del Ingreso.

El paquete de medidas incluye sumas fijas no remunerativas a cuenta de futuros incrementos y créditos para trabajadores, mejoras para monotributistas, aumentos para jubilados, ayuda social, prefinanciación de exportaciones y baja de retenciones para economías regionales, entre otras.

El jefe de Gabinete y candidato a vicepresidente de Unión por la Patria (UxP), Agustín Rossi, remarcó este lunes el "impacto favorable" que van a tener las medidas anunciadas por su compañero de fórmula y afirmó que el objetivo es "pasar el mal trago" de la devaluación impuesta por el Fondo Monetario.

"Las doce medidas anunciadas son muy importantes y tienen un impacto favorable para los distintos sectores de la población. Están destinados fundamentalmente a compensar lo que ha sido la devaluación impuesta por el FMI. Hay que recordar que ese crédito lo tomó (el expresidente Mauricio) Macri, que es el jefe de los otros dos candidatos a la presidencia (Patricia) Bullrich y (Javier) Milei", afirmó.

En similar sentido, la ministra de Trabajo, Raquel 'Kelly' Olmos, dijo esta mañana -al explicar el alcance de varias de las medidas- que las decisiones fueron pensadas para proteger "a los trabajadores y a los más humildes del país" en una situación "extremadamente restrictiva", esencialmente motivada por la deuda con el Fondo Monetario Internacional (FMI).

"El FMI actúa como el usurero del barrio, que ahora preocupado por todo lo que le dio a Mauricio Macri, pretende condicionar más la capacidad de decisión de nuestro gobierno. Nosotros estamos cumpliendo con los pagos al FMI, pero intentamos mantener el mayor nivel de autonomía y soberanía en las decisiones que nos es posible en el marco de la situación heredada", señaló la ministra.

Desde el sector privado, por su parte, en especial en lo que respecta a la decisión del pago de una suma fija para empleados, la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC) manifestó su "profunda preocupación" por el compromiso que se deberá asumir y remarcó que "son las negociaciones paritarias el ámbito donde deben determinarse las remuneraciones, toda vez que allí se pueden conciliar las legítimas pretensiones de los trabajadores con las reales posibilidades de las empresas de cada sector".

"La entidad -agregaron- es plenamente consciente del deterioro que el poder adquisitivo de los salarios experimenta mes a mes de la mano de la persistente y elevada inflación", señaló la CAC, pero advirtió que "buena parte de las empresas del país se encuentra en una delicada situación, debido justamente a una macroeconomía desordenada y con un estancamiento que acumula una década".

En similar sentido, la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) expresó que "el mecanismo de ajuste salarial del sector privado son las paritarias y no una imposición del Estado sobre las relaciones laborales fuera de su alcance".

En ese sentido, CAME sostuvo que cada sector de la economía y cada empresa en particular atraviesan "diferentes situaciones que jamás pueden homologarse al punto de establecer unilateralmente aumentos generales, aun asumiendo el Ejecutivo nacional el 50% del incremento dispuesto".

Desde el sector pyme, el presidente de Industriales Pymes Argentinos (IPA), Daniel Rosato, dijo que se trata de "anuncios importantes en un momento complicado, donde la gente necesita mejorar sus salarios. Esto viene a ser una recomposición a cuenta que había que hacerla ahora y es clave el acuerdo de precios que está haciendo el gobierno con los combustibles fijados a cero el aumento hasta noviembre".

"Estamos de acuerdo de que el salario mínimo no alcanza, y en el sector pyme entendemos que el mercado interno si el trabajador no mejora su salario nos perjudicamos todos, es una rueda, un dominó. Esto había que hacerlo, era necesario y la medida va a ayudar. Es un beneficio", completó Rosato.

En similar sentido, la Asamblea de Pequeños y Medianos Empresarios (Apyme) consideró como "muy positivas" las medidas anunciadas por Massa, que apuntan principalmente a sostener la actividad, el consumo y el ingreso de divisas.

"En un contexto de aumentos de precios y costos que afectan en particular a los sectores más vulnerables del trabajo y la producción, "es imperioso recuperar y proteger el poder adquisitivo de la población, fortaleciendo la demanda en el mercado interno, y por lo tanto las ventas de las Mipymes", señalaron desde Apyme.

En el análisis de las medidas, el exsecretario de Comercio Roberto Feletti dijo que las medidas son un "shock de recuperación del consumo" y aseguró que de octubre en adelante habrá "un escenario de mayor flujo de divisas hacia la Argentina".

"El plan es muy consistente", afirmó Feletti en declaraciones a FM La Patriada, al explicar que el programa de fortalecimiento del consumo tiene dos aristas "por un lado, un acuerdo de precios que sea consistente", y consideró que "haber unificado la capacidad regulatoria del Estado, la Aduana y Secretaría de Comercio, para hacer cumplirlo es muy importante".

Por su parte, el director del Centro de Economía Política Argentina (CEPA), Hernán Letcher, sostuvo que las medidas "ponen en valor" a los asalariados y al sector productivo y que a la vez este paquete de anuncios "confronta con las miradas" de los postulantes de Juntos por el Cambio (JxC), Patricia Bullrich, y de La Libertad Avanza (LLA), Javier Milei.

Letcher desestimó las críticas a las medidas anunciadas al señalar que provienen de grupos "interesados" en "fomentar nuevamente un salto en los precios", y por el contrario entendió que "vienen a atender el impacto que tuvo la devaluación forzada por FMI y que si bien "no resuelven el sí mismas la distribución del ingreso" esa cuestión "en todo caso, será tema de discusión para el futuro gobierno".

Por su parte, el ministro de Trabajo de la provincia de Buenos Aires, Walter Correa, consideró que las medidas eran "necesarias" y son positivas para "fortalecer la campaña" ya que "inyectan recursos, y esperanza para activar la campaña, es positivo y, también, a nosotros, los militantes del campo popular, nos da una carga de cuestiones favorables para fortalecer la campaña y ganar en octubre".

Correa agregó que "se arregló con el FMI esa bomba de tiempo que nos dejó el macrismo cuando hizo ese acuerdo con fines electorales, y ahora rápidamente nos ponemos a gobernar y ya determinar estas medidas", al referirse a los anuncios que realizó Massa.

Desde el sector gremial, el secretario general de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), Hugo Godoy, evaluó que las medidas "eran urgentes" para los trabajadores y consideró que el Gobierno "está encaminado", pero "se quedó a medio camino" por los "condicionamientos e imposiciones del FMI".

El dirigente de ATE Nacional explicó que "60 mil pesos era lo que se solicitaba como suma fija en marzo y la realidad es que la inflación (ahora) está mucho más disparada de lo que estaba en ese momento" y consideró que trabajadores municipales y provinciales "son los más afectados hoy en el universo de trabajadores estatales".

Entre las voces críticas, el legislador porteño por el Frente de Izquierda Unidad (FIT-U) Gabriel Solano manifestó su disconformidad con el paquete de medidas y advirtió que "para enfrentar a (Javier) Milei es importante enfrentar el ajuste del Gobierno actual, responsable de la crisis social, económica y política".

"Por eso impulsamos asambleas en todos los lugares de trabajo y un congreso de base con delegados de todas las organizaciones de trabajadores ocupados y desocupados", apuntó Solano en un comunicado.