Familiares de Carlitos Fernández marcharon en silencio otra vez y encontraron respuesta positiva

Durante horas de la tarde del viernes, la familia Fernández junto a toda la comunidad del barrio Industrial volvió a manifestarse por tercera vez en esta iniciativa de Marcha del Silencio por las calles saladeñas. En esta ocasión el punto principal al cual se dirigieron fue la Dirección Provincial de Energía de Corrientes (DPEC), distrito local, para solicitar una mejora en la iluminación.
Al igual que las dos marchas anteriores, la Ruta Nacional Nº 118, a la altura del barrio industrial fue el lugar donde toda esa comunidad se agrupó para trasladarse hacia el centro saladeño con antorchas prendidas, carteles, pancartas y pasacalles.

Pasada las 19, los familiares de Carlitos hicieron entrega de un petitorio al jefe del distrito Saladas de la DPEC, para que por su intermedio se pueda gestionar la pronta iluminación del trayecto de la ruta 118 que va desde las cuatro bocas (ingreso a Saladas) hasta la intersección de la avenida Juan Pujol.

Una vez terminado el encuentro con la gente de DPEC, continuó la marcha por la calle Alvear, donde se detuvieron un instante y le transmitieron su pensamiento a la Senadora Provincial Susana Edith González quién casualmente se retiraba de una emisora radial. Los ánimos para con la funcionaria provincial no fueron de los mejores y esto lo terminaron de confirmar instantes luego, familiares del joven fallecido y personas allegadas a la familia.

El próximo destino fue, la Comisaría Departamental para pedir justicia, pero fue breve el cese en esta institución ya que se ausentaba de la ciudad el Comisario Víctor Isnardo. Es así como, inmediatamente se dirigieron a la Municipalidad de Saladas donde gustosamente el Intendente Daniel Alterats los recibió.

Rubén Fernández (padre de Carlitos), tomó la palabra e interrogó al máximo funcionario departamental solicitando información de las gestiones que realizó el municipio para empezar a revertir los problemas con el transito en la ciudad, y sobre todo en esa zona.

Alterats, colmó las expectativas de los manifestantes cuando transmitió la solución que habían hallado a esa cuestión. “El municipio ha tomado la determinación de comprar doce luminarias completas, que se van a instalar, con lámparas de 250 wats de sodio, similares a las que se han colocado en la avenida Coronel Blanco; son los brazos de 2 mt.20 cm. Que van a estar adheridas a las columnas de cemento que están ubicadas a la entrada de Pindapoy y que se extienden hasta la capilla de San Pantaleón” dijo el intendente.

También comentó que se llevará a cabo la construcción de un refugio, similar a una garita, a diferencia que en el plano es más largo, ya que servirá a las personas para la espera del colectivo urbano y también tendrá un espacio que se utilizará a modo de oficina donde podrán trabajar efectivos policiales y de transito para el control.