El básquet y su escasa mediatización

En nuestro último editorial, escrito sobre el inicio de la Liga, hablábamos de los desafíos que planteaba la nueva temporada. Entre ellos nombramos el de intentar darle al básquet argentino la masividad que se merece por los resultados obtenidos en esta década. Hoy, un mes después, tenemos que volver sobre el mismo tema porque no se vislumbra cambio alguno.
La situación provoca desazón. Pese a que todos los días nacen páginas web que se ocupan del básquet, el problema está en el mínimo espacio que se le da a nuestro amado deporte en los medios nacionales.

Pese a que perdió la televisación del fútbol, TyC Sports ha mantenido la emisión de un solo partido por semana y le dio al programa Uno contra Uno el "privilegio" de salir en el horario primetime de los martes a la una de la mañana (pero con repetición los miércoles a las 7:30, ojo).

Sin embargo, valoramos el trabajo de hormiga que hace el colega Fabián Pérez junto a su equipo, luchando contra los molinos de viento en un canal que genera continua indignación en los televidentes. La TV es el medio de masividad por excelencia y sin ese respaldo el básquet se muere.

El título de Quimsa en la Liga Sudamericana pasó prácticamente desapercibido. ¡No se televisó un Final Four con tres de los cuatro finalistas de nuestro país! El TNA recién pudo verse este lunes por TyC Max (con producción externa al canal, un dato no menor) y pareciera que recién arrancó cuando en realidad ya lleva más de un mes de competencia.

Recientemente leímos un comentario de Fabián Pérez en el blog de Marcelo Nogueira y Marcelo Figueras, doblemblog.com, en el que marcaba un aspecto interesante: los canales no están interesados en televisar básquet.

La dirigencia de la Asociación de Clubes deberá trabajar para que esta situación cambie. Perdonen nuestra terquedad, pero no podemos creer que a nadie le interese o vea al básquetbol como negocio. Nos da la sensación de que está mal explotado y esa es tarea de la AdC.

Se tendrán que rever varias cuestiones, como por ejemplo la enorme cantidad de partidos que se juegan en la A. Con tantos encuentros programados (44 de serie regular, más Liga Argentina, Súper 8 y torneos internacionales) no hay bolsillo que aguante y así se ven estadios semi vacíos que espantan a los posibles sponsors.

En el TNA se da el otro extremo, hay poquísimos juegos en nueve meses y algunos clubes no pueden solventar los gastos que genera pagarle a un plantel durante tanto tiempo. ¿Por qué no se acorta la duración de la categoría? ¿Por qué no se realiza un mini torneo en una sede fuerte con los mejores de las dos zonas al terminar la primera fase para que los equipos tengan algún otro aliciente tanto deportivo como económico?

La AdC está obligada a tomar nota de estas cuestiones y dar un golpe de timón porque de esta manera no se puede continuar. Hace unos meses, Pablo Tosal alertó acerca de la gravedad de la situación en su sitio pickandroll.com.ar, un medio con miles de visitas diarias pero que aparentemente no es leído por la dirigencia del básquet argentino. El statu quo debe modificarse señores, por favor reaccionen.

Apéndice: Dos páginas diarias son muy importantes pero sería bueno que alguna vez el básquet de la Liga Nacional salga en la tapa de Olé luego de un clásico marplatense o tras una victoria de X sobre Y.

Es triste sólo aparecer en portada cuando ocurren hechos de violencia, que no hay que esconder pero que no son lo único que merece semejante promoción en EL diario deportivo del país.


GENTILEZA: Agustín Remiro - Juan Dambolena
“Generación Dorada”
(www.generaciondorada.com)