Las estaciones de servicio en toda la provincia se vieron azotadas durante los últimos días de 2010 por la escasa provisión, principalmente de nafta. La venta se racionalizó y en algunos casos se puso como tope de carga un monto no superior a los 100 pesos. Otros restringieron los horarios de atención. La postal hasta anoche eran las largas colas de espera. El principal motivo del desabastecimiento apunta al crecimiento de la demanda frente a una paulatina disminución de producción de combustible en el país.
La crisis por el desabastecimiento de combustible se agudizó en los últimos tres días de 2010 en prácticamente todo el territorio provincial. Un relevamiento realizado por este diario en terreno y a través de comunicaciones telefónicas indica que el principal faltante fue de nafta y afectó directamente a automovilistas locales y visitantes que llegaron durante Navidad y Año Nuevo a pasar las fiestas con sus familiares, y debieron soportar largas horas de espera para superar las colas y llegar a cargar sus tanques. Propietarios y empleados de las expendedoras explicaron que se debió racionar la venta.
El jueves 30, EL LIBERTADOR llegó a la ciudad de Mercedes y pudo observar que una de las postales predominantes eran las largas filas de automóviles que se apostaban en inmediaciones de las estaciones de servicio.
El clima de tensión por la espera se agravó entre los clientes por el calor que apremió durante toda la jornada. Todos buscaban que las horas perdidas en las filas valieran la pena y al llegar a las bocas de expendio pedían que les llenen el tanque, pero la carga comenzó a racionarse.
Cuando caía la tarde, uno de los encargados de la YPF comentó a este diario que no se cargaban más de 20 litros por vehículo "para poder cumplir con todos".
"El problema es que recibimos 6 mil litros por día y no alcanza porque la Shell está desabastecida y hay mucha demanda. Aunque pidamos más combustible, no envían más. Todo tiene que ver con la disminución de la producción en los últimos años", aseguró el entrevistado.
Otra de las medidas implementadas frente a la crisis en las expendedoras locales fue la restricción horaria, al menos durante los últimos tres días de 2010 en la que las estaciones se vieron sobrepasadas por la demanda.
En Mercedes temían que el faltante también se traslade al caso del gasoil porque complicaría a uno de los principales motores de la economía local: la producción agrícola. No obstante, la esperanza está puesta en que todo se normalice para los próximos días de este 2011.
El viernes 31, la problemática se extendió a Curuzú Cuatiá y en las estaciones ubicadas en las Cuatro Bocas de Saladas las mayores colas se registraron entre desde el lunes hasta el miércoles y éste día se decidió cupificar el despacho. "Sólo se carga hasta 100 pesos en nafta. La venta de Ultradiesel es normal porque no hubo mayor movimiento de camiones durante las fiestas.
Veremos qué pasa esta semana ", dijo a este medio un empleado de una de las expendedoras y agregó que el desabastecimiento se siente desde inicios de diciembre y aunque se soliciten a las petroleras más combustible, la provisión no supera los 10 mil litros diarios.
En Monte Caseros, ayer las colas se extendían por varias cuadras y también la venta era medida. Lo mismo sucedía en Gobernador Virasoro, Santo Tomé y Bella Vista.
Por su parte, el sector productivo está atento a esta situación. Un referente de los arroceros comentó a este diario que los que no lograron obtener la provisión necesaria antes del inicio de esta crisis de abastecimiento, podrían ver seriamente afectada la tarea de cosecha.
Cabe recordar que frente a la preocupación generalizada, el Gobierno nacional, a través del Ministerio de Agricultura emitió un comunicado hace dos días afirmando que se garantizará el combustible para el sector.
PREOCUPA EN EL PAÍS LA MERMA DE LA PRODUCCIÓN DE NAFTA
El faltante de combustible preocupa al sector productivo. Si la crisis se agudiza en enero podría complicar la etapa de cosecha. Frente a la inquietud, el Ministerio de Agricultura de la Nación emitió un comunicado el jueves y garantizó el normal abastecimiento de gasoil para el sector.
La cartera especificó que en forma conjunta con la cartera nacional de Planificación y la Federación de Contratistas Rurales, llevan a cabo un monitoreo permanente con el objetivo de asegurar el normal suministro de combustible.
No obstante, desde las entidades productivas no hay tanta confianza. En este marco, la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap) advirtió: "Una vez más escasea el gasoil en el interior del país justo cuando más se necesita, en plena campaña agrícola 2010-2011".
A la hora de explicar el desabastecimiento, todos los caminos conducen a una realidad: las petroleras actualmente producen menos combustible que hace 10 o 20 años frente a un incremento de la demanda por el crecimiento del parque automotor en todo el territorio nacional.
Un reciente informe publicado por Clarín indica que en 1990, la Argentina produjo 7.165.032 metros cúbicos de nafta, según datos el Instituto Argentino del Petróleo y el Gas. Mientras en 2009, último dato anual completo, la producción fue de 6.035.175 m3.
"La explicación es que no hay nueva capacidad de refino, se hicieron toques a las refinerías existentes, pero no hay ninguna nueva", señaló el ex secretario de Energía Daniel Montamat y advirtió que el problema de falta de inversión fue advertido ya hace varios años atrás.
El jueves 30, EL LIBERTADOR llegó a la ciudad de Mercedes y pudo observar que una de las postales predominantes eran las largas filas de automóviles que se apostaban en inmediaciones de las estaciones de servicio.
El clima de tensión por la espera se agravó entre los clientes por el calor que apremió durante toda la jornada. Todos buscaban que las horas perdidas en las filas valieran la pena y al llegar a las bocas de expendio pedían que les llenen el tanque, pero la carga comenzó a racionarse.
Cuando caía la tarde, uno de los encargados de la YPF comentó a este diario que no se cargaban más de 20 litros por vehículo "para poder cumplir con todos".
"El problema es que recibimos 6 mil litros por día y no alcanza porque la Shell está desabastecida y hay mucha demanda. Aunque pidamos más combustible, no envían más. Todo tiene que ver con la disminución de la producción en los últimos años", aseguró el entrevistado.
Otra de las medidas implementadas frente a la crisis en las expendedoras locales fue la restricción horaria, al menos durante los últimos tres días de 2010 en la que las estaciones se vieron sobrepasadas por la demanda.
En Mercedes temían que el faltante también se traslade al caso del gasoil porque complicaría a uno de los principales motores de la economía local: la producción agrícola. No obstante, la esperanza está puesta en que todo se normalice para los próximos días de este 2011.
El viernes 31, la problemática se extendió a Curuzú Cuatiá y en las estaciones ubicadas en las Cuatro Bocas de Saladas las mayores colas se registraron entre desde el lunes hasta el miércoles y éste día se decidió cupificar el despacho. "Sólo se carga hasta 100 pesos en nafta. La venta de Ultradiesel es normal porque no hubo mayor movimiento de camiones durante las fiestas.
Veremos qué pasa esta semana ", dijo a este medio un empleado de una de las expendedoras y agregó que el desabastecimiento se siente desde inicios de diciembre y aunque se soliciten a las petroleras más combustible, la provisión no supera los 10 mil litros diarios.
En Monte Caseros, ayer las colas se extendían por varias cuadras y también la venta era medida. Lo mismo sucedía en Gobernador Virasoro, Santo Tomé y Bella Vista.
Por su parte, el sector productivo está atento a esta situación. Un referente de los arroceros comentó a este diario que los que no lograron obtener la provisión necesaria antes del inicio de esta crisis de abastecimiento, podrían ver seriamente afectada la tarea de cosecha.
Cabe recordar que frente a la preocupación generalizada, el Gobierno nacional, a través del Ministerio de Agricultura emitió un comunicado hace dos días afirmando que se garantizará el combustible para el sector.
PREOCUPA EN EL PAÍS LA MERMA DE LA PRODUCCIÓN DE NAFTA
El faltante de combustible preocupa al sector productivo. Si la crisis se agudiza en enero podría complicar la etapa de cosecha. Frente a la inquietud, el Ministerio de Agricultura de la Nación emitió un comunicado el jueves y garantizó el normal abastecimiento de gasoil para el sector.
La cartera especificó que en forma conjunta con la cartera nacional de Planificación y la Federación de Contratistas Rurales, llevan a cabo un monitoreo permanente con el objetivo de asegurar el normal suministro de combustible.
No obstante, desde las entidades productivas no hay tanta confianza. En este marco, la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap) advirtió: "Una vez más escasea el gasoil en el interior del país justo cuando más se necesita, en plena campaña agrícola 2010-2011".
A la hora de explicar el desabastecimiento, todos los caminos conducen a una realidad: las petroleras actualmente producen menos combustible que hace 10 o 20 años frente a un incremento de la demanda por el crecimiento del parque automotor en todo el territorio nacional.
Un reciente informe publicado por Clarín indica que en 1990, la Argentina produjo 7.165.032 metros cúbicos de nafta, según datos el Instituto Argentino del Petróleo y el Gas. Mientras en 2009, último dato anual completo, la producción fue de 6.035.175 m3.
"La explicación es que no hay nueva capacidad de refino, se hicieron toques a las refinerías existentes, pero no hay ninguna nueva", señaló el ex secretario de Energía Daniel Montamat y advirtió que el problema de falta de inversión fue advertido ya hace varios años atrás.
